Disponiendo de más tiempo que dinero (del 30 de junio al 30 de agosto), buscamos un
vuelo barato a Kenia. Entre las múltiples opciones apareció uno de
Airarabia con origen en Atenas y escala en Sharjah (Emiratos Arabes Unidos), por menos de 400 euros. Considerando que podíamos ir gratis a Atenas desde Barcelona, gracias a un premio que nos había tocado, nos pareció una opción razonable para evitar pagar los 800 euros de las convencionales. Eso sí había que hacer una noche en
Atenas, así que decidimos ampliar nuestra estancia a dos para poder visitar los principales monumentos de la capital griega.
El vuelo de Barcelona a Atenas llegaba a las 2:15 a.m. hora local, por lo que finalmente
nos quedamos a dormir en las incómodas sillas del aeropuerto. A través de internet, con
hostelworld, habíamos reservado para la siguiente noche el Hotel Fivos por 40 euros la habitación doble, con desayuno. A las 7 de la mañana cogimos el autobús X95 (3´20 euros) hasta
Syntagma, ya que la línea de metro que llega al aeropuerto está en obras hasta febrero. Y desde allí cogimos el metro para una parada:
Monastiraki, dónde está el hotel. La recepcionista es bastante amable e incluso habla algunas palabra de español y, aunque no podemos entrar hasta las 12, conseguimos
liberarnos de las mochilas.
Buscamos un sitio para desayunar pero está todo cerrado. Después de callejear un poco encontramos un sitio cerca de la ágora romana. Bajamos la guardia y no preguntamos el precio de los cafés. Estamos solos, sabemos que nos van a clavar... pero no tanto. Ocho euros dos cafés con leche!! Para tocar un poco las narices pagamos con un billete de 200 euros pero con eso nos quedamos.

Paseamos calle arriba hacia la Acrópolis y nos alegramos de que la entrada sea gratuita con el ISIC (6 euros), 24 euros de ahorro, lo hemos amortizado el primer día. Aunque es pronto ya hace mucho calor y hay muchísimos turistas, sobre todo grupos organizados de cruceros, todos con sus pegatinas de colores para no confundirse. Es una lástima que esté todo con andamios porque desmerece la visita.

Continuamos haciendo turismo por la Antigua Ágora, viendo su museo y el templo, contentos de que haya abundantes fuentes de agua fría donde rellenar nuestra botella. Atravesando el mercado Flea volvemos hacia el hotel a descansar un poco. Tenemos que subir hasta el cuarto piso andando pero la habitación está bien, limpia y con aire acondicionado. Descansamos hasta la hora de comer.
Nos acercamos al recomendado Restaurante Plátanos, un clásico que está abierto desde 1932. En su terraza al aire libre degustamos musaka y cordero con arroz (20 euros los dos). Hacemos una parte del "Circuito a pie" de la Lonely Planet, empezando por el Ágora romana con su torre de los vientos. Rodeamos la Acrópolis hacia el Arco de Adriano y el Templo de Zeus con sus impresionantes columnas. Buscando siempre la sombra y bebiendo mucha agua, paseamos por los Jardines Nacionales para luego cruzar hacia el barrio de Plaka y continuar callejeando entre sus agradables terracitas y tiendas, viendo la Acrópolis desde distintos ángulos.


Descansamos otro poco en el hotel y sobre las siete de la tarde salimos hacia la
Colina de las Musas (o de Filipapos) donde subimos para ver la puesta de Sol disfrutando de excelentes vistas del Partenón y de toda la ciudad de Atenas. Desdendemos tranquilamente hacia Plaka por la parte sur de la Acrópolis, por una agradable y concurrida avenida peatonal. Terminamos el día cenando
Gyros pita por la calle y de postre, un buen helado.

Al día siguiente, apuramos el horario del desayuno hasta las 9:30. Después de una última ducha hacemos el check out. Malas noticias, tenemos que pagar 3 euros por mochila para que nos las guarden. Intentamos negociar un descuento pero no hay manera, sólo nos las dejan gratis hasta las dos de la tarde pero nuestro vuelo sale a las 23:30. Punto negativo para este hotel.
Empezamos caminando hacia Syntagma para ver el famoso cambio de guardia. Antes entramos en una oficina de correos para ampliar nuestra colección de sellos y un hombrecico mayor me intenta robar mis gafas de sol que había dejado apoyadas en el mostrador. ¡Qué cara!
Cruzamos la calle utilizando el paso del metro donde se puede ver una parte del antiguo cementerio y restos del acueducto de Peisistratos, encontrados durante las excavaciones para construir la estación. Ya en el edificio de El Parlamento, buscamos la sombra hasta la hora en punto, cuando se realiza el cambio de guardia de los Ezvones ante la Tumba del soldado desconocido. Entre vendedores de comida para las palomas y turistas, recuerdo todas las fotos que les hice años atrás, durante el viaje de estudios de 3º de BUP, con mi amiga Beatriz.

Continuamos el paseo matutino callejeando y descubriendo pequeñas iglesias bizantinas, camino del
Mercado central. Investigamos su parte cubierta con la sección de pescado, pollo, carne, etc. y luego la calle
Aristogeitonos donde están los puestos de fruta y verdura. Compramos frutos secos, cacahuetes y pistachos griegos, y vamos hacia
Plaka a comer en una de sus múltiples terrazas. Pido otra vez
musaka, esta vez incluida en un menú con ensalada griega y helado (2o euros los dos).

Caminamos hacia el
nuevo museo Acrópolis, donde también entramos gratis con el carnet internacional de estudiante por ser europeos. Está bastante bien, con buenas vistas de la Acrópolis. Cabe destacar la tercera y última planta que está girada para estar orientada igual que el Partenón y en ella se muestran los
restos que se conservan de los relieves. Además un audiovisual explica cómo se construyó y su evolución a lo largo del tiempo, cómo lo conviertieron en iglesia cristiana y luego mezquita, antes de destruirlo parcialmente.

De camino hacia el hotel podemos conectarnos a internet un poco e incluso
publicamos un post, ¿os acordáis? Compramos algo para cenar en el aeropuerto y vamos hacia allá después de recoger las mochilas.
Una vez hecho el check in todavía tenemos tiempo de usar las conexiones gratuitas de internet del aeropuerto griego y cenamos antes de embarcar hacia Sharjah a las 23:30. Ya queda menos para llegar a África.