Delfines del Mekong en Kratie

Después de nuestra breve incursión en la provincia de Mondulkiri, proseguimos el viaje hacia Kratie en minivan (7,5 USD, de 8 am -13 pm). Buscando hotel vimos grupos de españoles con viaje organizado, se nota que estamos en temporada alta. Nos quedamos en  el Hotel Santepheap (7 USD, hab. doble con baño).

Después de instalarnos fuimos directos a comer. Esa misma tarde queríamos aprovechar para acercarnos a ver los delfines Irrawaddy, especie en peligro de extinción. Se cree que hay unos setenta y pocos en la zona del Mekong comprendida entre Kratie y la frontera con Laos, cerca de Don Khone.

Todo está perfectamente organizado y es una excursión muy fácil. Las barcas salen de

Kampi, 15 km al norte de Kratie. Para llegar hasta allí puedes ir en moto (4 USD, ida y vuelta + tiempo de espera) o en tuk-tuk. En el embarcadero, pagas el precio fijo (7 USD por persona) antes de subir a la pequeña embarcación a motor que te indican.

Y comenzamos a recorrer el Mekong río arriba, en busca de los delfines de agua dulce. Aunque no consigamos verlos, el paseo por el río en toda su inmensidad es todo un espectáculo. No alcanzas a ver las orillas, tan sólo pequeñas islas de vegetación flotando y algunos pescadores.

Pero por fin, después de más de veinte minutos de trayecto, empezamos a divisarlos. Pequeños grupos de dos o tres individuos, saltando en el agua, mientras los turistas intentamos sin éxito conseguir una foto. Ya hemos aprendido la lección y preferimos mirar, disfrutar del momento.

Al día siguiente habíamos pensado cruzar a Koh Trong, un pequeño islote en medio del Mekong en frente de Kratie. Cuando íbamos a coger el ferry nos mosqueamos porque nos pedían cuatro veces más que a los locales, y además riéndose. Más por cuestión de principios que por dinero, decidimos prescindir de la visita. En vez de ello paseamos por la orilla del río hacia Wat Roka Kandal, pequeño templo de principios del siglo XIX, situado dos kilómetros al sur. El camino resultó muy agradable y nos permitió contemplar una vez más, la vida al lado del río.

Esa misma mañana, partimos hacia Ratanakiri, otro largo trayecto en autobús (8 USD).