Pintaba mal el tema: de noche, "mafiosos" indonesios esperando a las presas... pero al final
no fue tan dificil. No hizo falta el plan B de quedarnos a dormir alli mismo y esperar, porque despues de negociar un poco conseguimos ir en una
minivan con mas gente por 70.000 INR los dos. Eso si, una vez en
Senggigi nos pidieron 100.000, despues nos daban mal los cambios... no se si me va a quedar paciencia para los dias que nos quedan en este pais. Con la empanada que llevabamos estuvimos dando vueltas y mas vueltas buscando hotel para quedarnos en el primero que habiamos visto,
Lina's. Cenamos y a dormir. Estamos muertos.
Al dia siguiente nos lo tomamos de
relax. La guia hablaba de las playas de
Senggigi como si fueran las mejores del mundo pero tampoco era para tanto. Bueno, he de confesar que no estan mal (inmensas, de arena negra, palmeritas) pero con las que hemos visto ultimamente...
Recordaba Lombok por un
trekking del que lei hace tiempo, el que se hace en el
volcan Rinjani. Estuvimos preguntando en las agencias de viajes para conseguir informacion. Basicamente en todos los sitios nos querian vender la excursion de 3 dias, empezando en
Senaru, haciendo cumbre (es un 3000) y terminando en otro pueblo,
Sembalun Lawang. No nos veiamos con demasiadas fuerzas para ese reto y ademas estaba empezando a llover casi todos los dias un rato, asi que decidimos ir por nuestra cuenta hasta
Senaru para ver de cerca el terreno. Ilusos de nosotros! De nuevo comenzaba
la pesadilla de movernos en transporte local en este pais de locos. Esta vez nos lo tomamos a risa e incluso acabamos bromeando con los "enemigos" pero no hubo forma de conseguir un precio medio logico. Cada vez que paraba algun
transporte local (con un monton de indonesios), nos decian que "charteabamos" la
bemo y nos pedian lo que les venia a la cabeza. Al final nos rendimos y cambiamos de destino.
Nos ibamos a
las Gili, tres islitas que hay en el noroeste de Lombok y que son otro
paraiso en la tierra. Tampoco fue facil llegar hasta alli pero pudimos "chartear" una
bemo por unos 4 dolares hasta el embarcadero donde salen los botes hacia las islas (Bangsal). En la negociacion le remarcamos que nos llevara hasta alli mismo porque en la guia habiamos leido que el lugar era otra "jungla" de mafiosos. Hacen siempre igual, te dicen que si pero luego no puedes bajar la guardia porque
intentan una y otra vez salirse con la suya. Primero intento que nos bajaramos en el pueblecillo de antes y que fuesemos en coche de caballos hasta el puerto (para evitarse problemas). Le recordamos que hasta el embarcadero. Un kilometro antes de llegar, donde estan los mafiosos, intentaron que nos bajaramos de la
bemo. Les dijimos que si teniamos que bajar no le ibamos a pagar al conductor porque era lo que habiamos acordado. El chulito de turno nos dijo que no podiamos seguir, que nuestro conductor no hablaba ingles (en fin, en que idioma habiamos negociado?). Si el tozudo, nosotros mas. Unas amenazas mas tarde (que si no estamos en nuestro pais...) y el conductor que vio que perdia el negocio, arranco de nuevo y
nos llevo hasta la taquilla oficial de los botes.
Se supone que hay barcos publicos que por 9.000 INR te llevan hasta cualquiera de las tres islas. Era ya casi al mediodia y nos dijeron que se habian terminado, que teniamos que coger un shuttle por 26.000. Cogemos aire, lo pensamos y al final cedemos. Iremos a Gili Meno, se supone que la mas tranquila. Mas tarde nos enteramos que la llaman la isla de la luna de miel, a Gili Air la familiar y a Gili Trawagan la de la fiesta (con setas magicas incluidas).
Estuvimos alli cinco dias.
Marquitos estuvo un poco regulin de las tripillas (llevabamos mucho tiempo sin problemas gastricos y ya tocaba) asi que no hicimos gran cosa. Descansamos, relax, un poco de
snorkel, pasamos el dia medio tumbados en casetillas de bambu en frente de la playa, jugando a las cartas, leyendo nuestra nueva guia
Lonely Planet de
Nueva Zelanda...
Un dia conincidimos con los
australianitos, dos chicos de Sevilla que se fueron a aprender ingles a la otra punta del mundo y con los que charlamos sobre nuestro proximo destino en comun.
Decidimos cambiar de isla, a
Gili Air. De nuevo coincidimos con los sevillanos y cenamos con ellos charlando hasta tarde. A la mañana siguiente hicimos una excursion en barco para hacer
snorkel en las tres islas. Y de nuevo, pudimos
nadar con tortugas. No tengo palabras para describir la sensacion, inolvidable. Cierro los ojos y todavia veo a una de ellas, justo debajo mio, nadando a la vez durante unos minutos, rodeadas tan solo por un mar azul oscuro... En nuestra pequeña escala para comer en
Gili Trawagan pudimos comprobar que no necesitabamos mucho mas tiempo alli, ver el ambiente de fiesta, los carteles anunciando las setas magicas en el menu y poco mas, preferimos algo mas tranquilo. Como despedida de las Gili, una buena cena medio tumbados en frente del mar.
Con nuestras experiencias previas en el tema de transporte decidimos
minimizar los desplazamientos para poder disfrutar mejor de nuestra estancia en Indonesia. Un poco a mi pesar, desechamos la idea del
trekking en el Rinjani y fuimos a Bali para pasar alli los ultimos 10 dias.
Madrugamos para intentar coger un bote local hasta Bangsal pero de nuevo tuvimos que coger el shuttle, mas caro. Una vez alli andamos un poco hasta las minivanes de los turistas y conseguimos una por tan solo 40.000 INR cada uno hasta Lembar, donde sale el ferry hacia Padangbai en Bali. Empezamos bien. Cogimos el barco de las 12. Intentamos dormir un poco sin demasiado exito. Oimos una sirena y pensamos que era porque se cruzaba con alguna barca pero no, era para avisar de que habia delfines. Decenas de ellos, por todos los lados, saltando, rodeandonos, siguiendo las olas que ibamos dejando atras.
Al llegar a Bali la liamos un poco con el tema de los buses de turistas y no conseguimos llegar a un acuerdo. Mas tarde buscamos transporte local pero es tarde y ya no encontramos nada. Decidimos quedarnos a dormir en Padangbai, lugar bastante agradable, y seguir mañana nuestro camino hacia Ubud, en el interior de la isla.